Rutina de Vida Postmodernista

De todo y de nada.

jueves, mayo 18, 2006

Sudamérica de luto



Martes pasado en la noche.

Me encuentro observando por televisión Todo Noticias(TN), canal argentino de noticias por cable, cuando la pantalla anuncia, acompañada del característico audio alarmista, una noticia de último momento. Pienso en cambiar a algo más light anticipando la inminencia del relato de algún suceso de crónica roja o accidente de ruta menor, como es costumbre. Los pocos segundos que me toma esta reflexión permiten a los caracteres tomar forma de frase, una frase fatídica que me terminó por causar mucho dolor.

A LOS 69 AÑOS MUERE JORGE PORCEL, así, en mayúsculas, reza el titular. Así de simple, así de crudo, así se comunica la muerte de quien en vida fue uno de los mayores actores de comedia de latinoamérica.


Nacido en Buenos Aires cuando corría el año 36 del siglo pasado, la muerte lo alcanzó abatido. Sus articulaciones rotas por años y años de soportar su masa corporal lo condenaron a vivir la última década postrado en una silla de ruedas al tanto que otros problemas de salud fueron arrancándole su vitalidad, y lo que es peor, su notable talante para el humor. Su vesícula fue finalmente la que asestó el golpe de gracia, luego de efectuársele una operación días atrás, evidentemente sin éxito.

Durante su prolífica carrera rodó películas en una cifra cercana a las 50. Clásicos fueron sus programas humorísticos que sobrepasaron, al igual que sus films, las barreras fronterizas de su natal Argentina. ¡Cómo olvidar la dupla fantástica que protagonizó tantas aventuras: Porcel y Olmedo! Su postrera aparición en la pantalla grande no fue precisamente junto a Susana Giménez o Moria Casán, las vedettes argentinas de clásica aparición en sus realizaciones, sino de la mano de Brian de Palma y junto a Al Pacino, en la película de 1993 Carlito's Way.



La comedia de habla hispana que lloró en 1987 la desaparición del genial Olmedo hoy se enlutece con la muerte de otro de sus próceres. Si hay un cielo, hoy estará riendo y de fiesta con la reunión del singular dúo.


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